En medio de debates sobre la autonomía de las instituciones electorales en México, la Secretaría de Gobernación (Segob) salió al paso de las críticas que acusan al gobierno de querer influir en su funcionamiento. En una conferencia reciente, el titular de la Segob aseguró que “el gobierno no busca controlar los órganos electorales”, una frase que se ha convertido en el eje de la discusión pública.

La declaración se dio luego de que diversos actores políticos y sociales expresaran preocupación por posibles reformas que, según ellos, podrían debilitar la independencia del Instituto Nacional Electoral (INE) y otros organismos similares. La Segob respondió que las propuestas buscan mejorar la eficiencia y transparencia, no imponer control.

Este tema es clave para las nuevas generaciones, que están cada vez más involucradas en procesos democráticos. Entender cómo se organizan las elecciones y quién garantiza su imparcialidad es fundamental para fortalecer la participación ciudadana.

La frase citada refleja la postura oficial, pero el debate sigue abierto: ¿cómo asegurar que las instituciones electorales se mantengan libres de presiones políticas? ¿Y cómo puede la ciudadanía joven vigilar que así sea?